Add parallel Print Page Options

Yo la compré para mí, y di por ella quince monedas de plata y doscientos litros de cebada. Y le dije: «Tú serás mía durante mucho tiempo. No te prostituirás, ni tendrás a ningún otro hombre. Tampoco yo tendré otra mujer.» Porque durante mucho tiempo los hijos de Israel estarán sin rey ni príncipe, ni sacrificios, ni estatuas, ni efod ni terafines.

Read full chapter